sábado, 25 de julio de 2015

FRIEDRICH  VORDEMBERGE-GILDEWART
Friedrich Vordemberge-Gildewart es uno de los pocos artistas que se ha adscrito a una aproximación abstracta geométrica desde el principio. Después de estudiar diseño de interiores, arquitectura y escultura en la Escuela de Artes y la Technische Hochschule de Hannover, entró en  escena en 1923/24 como artista. Desde Hannover, en ese momento un importante centro de arte progresista, se puso rápidamente en contacto con el constructivismo ruso, la Bauhaus, y el grupo de Netherlandish De Stijl, al que se incorporó en 1925.

 En su obra fue dominado por la preocupación por las posibilidades creativas de formas geométricas, aunque su concepción es menos dogmática que sus colegas.



La producción de las relaciones armoniosas entre los componentes de la imagen es la principal preocupación de su pintura.


 El artista ha renunciado deliberadamente a acentos individuales en su arte y se limita a medios objetivos de expresión


En esta obra se ven tres poderosos campos de color a los que se contrapones los rectángulos estrechos que están  en el centro, pero estas tres “tiras” de color  proporcionan la energía que pone  la estructura de la imagen en movimiento. El truco: poner a sus valores de color los contrarios de los colores de los grandes rectángulos. El blanco delicado se afirma como no-color frente al negro, que es el segundo no-color en esta imagen. La pequeña raya de color rojizo se enfrenta con valentía al gran rectángulo  verde, que es su color complementario. Y la tira ocre va contra el azul. El amarillo y el azul son entre sí como el rojo y verde, que están  en fuerte contraste como colores complementarios que son y atraen uno al otro para hacerles brillar.

Entre el rectángulo verde y el azul no hay una separación nítida, así como en los bordes del pequeño cuadrado azul en la gran superficie azul. Estas fronteras borrosas generan vitalidad en el cuadro.
Hay un contraste entre la parte izquierda y derecha del cuadro. La izquierda es más geométrica, más definida, más pausada. La derecha no es uniforme; el color azul va cambiando de tonalidad de un lugar a otro, lo mismo ocurre con el verde, aunque la diferencia de tonalidad es menos acusada. Hay una especie de desequilibrio entre una parte y otra que da movimiento a una composición que a simple vista puede parecer estática. Pero ese desequilibrio no es tal, para restablecerle,  dar energía y movilidad plástica al cuadro están las estrechas tiras de color blanco, rojizo y ocre en la zona central.
Este es un cuadro de aparente sencillez, donde los agentes plásticos están muy presentes y le dan variedad, movilidad y tensión plástica.